miércoles, 30 de septiembre de 2009

Concepción aristotélica de la música

En La Política, Aristóteles, al tratar el tema de la educación juvenil, dedica gran espacio a explicar la música como materia obligatoria en la impartición de educación pública. Aquellos tiempos de la antigua Grecia tenían en su sistema educativo cuatro disciplinas, de la cuales a las tres primeras se las nota claramente como útiles (lecto-escritura, gimnasia y dibujo), mientras la cuarta (música), no. De ahí la necesidad de tal explicación.

Por otro lado cabe recordar que para el pensador griego, así como la guerra es en función de la paz, subordinada aquélla a ésta, el trabajo es en función del reposo, aquél subordinado a éste. Y al tener la música entre sus propiedades la de generar reposo y placer, es también absolutamente necesaria en la educación de un hombre libre, quien debe buscar más el ocio que el trabajo (pero sólo después de haber trabajado, y el estudio es trabajoso), más la paz que la guerra.

Y si, en principio, la música es, aunque necesaria, inútil, al tratar sobre música nos proponemos, utilizando algunas categorías aristotélicas, a continuación presentar una inútil pero necesaria concepción de música.

Como es de público conocimiento, la ontología aristotélica reconoce tres categorías para explicar al Hombre en su aspecto vital: vida vegetativa, vida sensitiva y vida intelectiva. Si se entiende a la música como una construcción humana hecha a imagen y semejanza del Hombre, tendrá ella correspondencia entre sus características y las del ser humano.

Así, la vida vegetativa del Hombre estará representada en la música por sus aspectos rítmicos, ya que ellos son los que mejor expresan las cuestiones del cuerpo, muy vinculadas éstas al primer concepto aristotélico acá mencionado.

La vida sensitiva será correspondida por los aspectos melódicos de la música, explicando esto en gran medida aquella idea romántica acerca de que una melodía expresa la vida afectiva del compositor.

La vida intelectiva es representada en música por su pensamiento armónico o de los sonidos simultáneos. La armonía fue y es considerada la variable más intelectual de la música.

¿Y el timbre?

No puedo admitir incondicionalmente la diferencia entre altura y timbre tal y como suele exponerse. Pienso que el sonido se manifiesta por medio del timbre, y que la altura es una dimensión del timbre mismo. El timbre es, así, el gran territorio dentro del cual está enclavado el distrito de la altura. La altura no es sino el timbre medido en una dirección. Y si es posible, con timbres diferenciados sólo por la altura, formar imágenes sonoras que denominamos melodías, sucesiones de cuyas relaciones internas se origina un efecto de tipo lógico, debe ser también posible, utilizando la otra dimensión del timbre, la que llamamos simplemente “timbre”, constituir sucesiones cuya cohesión actúe con una especie de lógica enteramente equivalente a aquella lógica que nos satisface en la melodía constituida por alturas. Esto parece una fantasía de anticipación y probablemente lo sea. Pero creo firmemente que se realizará. Y creo firmemente que contribuirá de una manera extraordinaria a aumentar el goce sensible, espiritual y anímico que el arte ofrece. Creo firmemente también que esto nos acercará a lo que nuestros sueños nos reflejan; que ensanchará nuestras relaciones con aquello que hoy nos parece inanimado, dando vida con nuestra vida a lo que por ahora está muerto para nosotros sólo porque nuestros vínculos con ello son mínimos.

¡Melodías de timbres! ¡Qué finos serán los sentidos que perciban aquí diferencias, qué espíritus tan desarrollados los que puedan encontrar placer en cosas tan sutiles!

¡Y quién se atreve aquí a aventurar teorías!


A. Schoenberg, Tratado de Armonía. Cap. XXII.
Madrid: Real Musical, 1979
 ¡Y quién se atreve aquí a decirlo mejor que el amigo Arnold!

3 comentarios:

  1. Maestro, eso de hombre libre buscando más ocio que trabajo le viene de perilla !!!!

    Saludos ociosos

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  2. Sí, creo que voy a dejar de hacer el Blog e iré a descansar, no vaya a ser cosa que los libres seamos cada vez más y terminemos siendo una aristocracia mayoritaria.

    A mí me da fiaca saludarla, estimada AF, sepa disculpar...

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  3. Agrego a su vez la relacion que da Socrates entre Placer y Dolor, en el momento en el que le retiran los grilletes para hacerlo beber la cicuta, el mismo reflexiona y se extrania de como uno si el otro no pueden existir, y de como es extranio que siendo tan diversos esten estrechamente relacionados.....a lo que podriamos decir, que es trabajo para un musico y que es ocio para un musico?, no estan tan estrechamente ligados los sentimientos de fatiga y satisfaccion, de trabajo exagerado y placer del descanso?, alleluia por aquellos que trabajan toda su vida por un segundo de placer musical!


    Juan Ignacio

    a mi me da fiaca seguir escribiendo aca jaja

    saludos pablo!

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